Florentino, a todo o nada

Pensé en llamar en un primer momento este artículo como “Mourinho, a todo o nada”, pero la realidad es que, con este nuevo esquema inglés del Madrid, quien realmente no tendrá salida en caso de que las cosas salgan mal, o no tan mal, sino simplemente menos bien que al Barcelona, no es otro que el hasta ahora todopoderoso presidente del club.

Es que Florentino, quien no se doblegó ante un Del Bosque ganador de todo para renovarle cuando la lógica lo pedía a gritos, ni dudó en utilizar su hábil muñeca para los negocios a la hora de fichar a los mejores futbolistas del mundo, parece haber encontrado en Mourinho la horma de su zapato.

"Mourinho ha ido demandando una autonomía de su gestión deportiva similar a la de los clubs ingleses. Hemos apostado por el mejor entrenador del mundo y queremos que esté muchos años con nosotros" admitió, derrotado ante el cadáver de Valdano.

Si esta temporada Mourinho gana todo con el Madrid, como lo hizo en su segundo año en el Inter, tendrá más que nunca las puertas abiertas para irse, probablemente de vuelta a la Premier, a seguir demostrando que es el mejor del mundo, y Florentino deberá rearmar una estructura en la que no sólo faltará quien decida la táctica, estrategia y preparación física, sino también los fichajes y el planeamiento futuro de todas las divisiones del club. Un hueco irreparable.

Si las cosas no salen como se espera, Mourinho se irá tarde o temprano, y el presidente se encontrará con la disyuntiva de tapar, a la desesperada, más de un hueco que se rifarán ya no sólo los involucrados en el fútbol por amor o pasado en un terreno de juego, sino también aquellos que sólo buscan provecho económico de la situación, como de hecho pasa actualmente, con un tal Jorge Mendes.